Hemorroides después de la cura
Las hemorroides son un problema muy común y la mitad de las personas que las padece las oculta, ya sea por vergüenza o por que no es del todo consciente de su problema. Hay muchas formas de eliminar las hemorroides de forma natural, como con la crema Hemapro. Por eso te contamos la experiencia de una persona que ha tenido que convivir con ello.
Si sufres de hemorroides, este puede ser uno de los artículos más extraños que hayas leído sobre este tema, especialmente porque la cura parece estar a años luz. Sé lo que es ese sentimiento. Yo también he pasado por eso, pero déjame decirte algo. Incluso después de la cura, tu vida nunca volverá a ser lo mismo. Este artículo lo explica.
Sufrí durante unos 10 años de prolapso de hemorroides extremas. Quizás sabes lo que es. Quizás las tuyas no son tan malas. Sólo tú sabes la respuesta.
En cualquier caso, un día descubrí que, efectivamente, mis hemorroides estaban curadas. La razón por la que he utilizado la palabra «efectivamente» es porque, técnicamente, todavía las tengo. Simplemente ya no me molestan. Ahora llevo una vida normal, bueno, realmente no, cualquier cosa menos normal. Y ese es el tema principal de este artículo.
Por supuesto, no tengo dolor, pero hay algo extraño en mi vida a pesar de eso. Mi vida todavía se desarrolla alrededor de mi enfermedad. Déjame explicarme.
Para mantenerme sin dolor, tengo que administrarme un tratamiento en el canal anal cada día tres veces al día. Tengo que hacer esto especialmente después de cada vez que voy al baño. Esto supone un problema interesante. ¿Qué pasa si salgo? ¿Qué pasa si necesito un baño mientras estoy fuera? Esto significa que tengo que cargar con el tratamiento adonde vaya. Ahora, afortunadamente, el tratamiento viene en botellas pequeñas, así que lo puedo llevar con facilidad. Aún así, durante el verano, sin chaqueta y con muy pocos bolsillos, teniendo que llevar la cartera, las llaves y el móvil, representa un problema interesante. Últimamente tengo que llevar un suéter con bolsillos para llevar las botellas ahí. ¿Puedes imaginarte lo que es llevar un suéter a 37 grados y con gente mirándote como si estuvieras loco?
Pero el inconveniente de tener que llevar el tratamiento sólo es el principio. Verás, el simple hecho de tener que llevar algo para mantener mis hemorroides sin que se hinchen significa que nunca me puedo olvidar de la enfermedad. Siempre lo tengo en la cabeza, siempre está ahí. Siempre estará ahí hasta el día en que muera y siempre tendré ese pensamiento de qué pasará si un día la enfermedad vuelve a ser como solía ser.
Por ahora, llevo dos años, 10 meses y 19 días sin dolor. Han sido los mejores 2 años, 10 meses y 19 días en los últimos 10 años y mientras no tenga dolor voy a disfrutar cada momento de esos días.
Si sufres de hemorroides y algún día encuentras una «cura» tienes que estar preparado para la vida tras la cura, porque, lo sepas o no, nunca va a volver a ser lo mismo.
Recomendación MásQueSalud
H
emapro es la crema para hemorroides que funciona directamente sobre la zona de la piel afectada, ayudando al alivio del dolor y consiguiendo su decrecimiento.
